Hace muchos muchos años se les daba a los niños vino quinado para abrir el apetito, algo que hoy en día nos parece inimaginable pero que dejó huella en toda una generación de españoles.

Hace muchos muchos años se les daba a los niños vino quinado para abrir el apetito, algo que hoy en día nos parece inimaginable pero que dejó huella en toda una generación de españoles.