La uva blanca Chardonnay marca el comienzo de la campaña para las bodegas manchegas en un año determinado por el fuerte calor estival
Variedades bien adaptadas a La Mancha, pero condicionadas por un delicado ciclo de maduración, más rápido y sensible que requieren una vendimia más ajustada en plazos. La primera quincena de agosto se traduce en un comienzo cada vez más estricto para las bodegas con Denominación de Origen La Mancha, cuya vendimia ya ha comenzado con la recogida de la blanca Chardonnay, la Moscatel o la Sauvignon Blanc a finales de semana. La nocturnidad y la mecanización caracterizan la recogida de estas variedades en una vigilancia y preocupación para que la uva entre en bodega en temperaturas moderadas, que se han convertido en una constante para las bodegas manchegas.
Las más madrugadoras, principalmente en la provincia de Ciudad Real, es el caso de la cooperativa El Progreso, en Villarrubia de los Ojos, donde «ya están vendimiando las primeras parcelas de Chardonnay, destinado para vino espumoso», como ha informado su director técnico, Juan Nieto. Junto a Bodegas Yuntero, de Manzanares, también en Socuéllamos, Cristo de la Bodega, ha abierto sus descargaderos para la recepción de Chardonnay.
La vendimia también se extiende al resto de provincias manchegas, donde por ejemplo, en Corral de Almaguer, Toledo, la Sauvignon Blanc se recogerá a finales de esta semana, como indican desde su la cooperativa Nuestra Señora de la Paz.
En la provincia de Cuenca, algunas bodegas todavía no han comenzado la vendimia. En municipios de la mancha conquense o limítrofes como San Clemente o Pedro Muñoz, la reducción de la cosecha ser verá afectada en más de un 40 %, debido al granizo caído durante el pasado mes de mayo. Un retraso puntual parece que también aparece en la provincia de Albacete.
Según confirman técnicos y enólogos, el fuerte calor del pasado mes de julio ha sido determinante paralizando el ciclo de maduración de la uva; el comportamiento térmico en las próximas semanas decidirá el grado y definitiva formación del fruto para variedades tradicionales, en los próximas días en una cosecha, que, dependiendo por zonas, se verá mermada en términos generales.
(con información de la D.O. La Mancha)